¡Las limpiadoras de la Universidad de Málaga vuelven a plantar cara!
Como ya se ha demostrado históricamente, la única manera de que la clase obrera mejore sus condiciones de vida y de trabajo es a través de su organización combativa. Así, las limpiadoras de la Universidad de Málaga han vuelto a ponerse en pie de guerra para asegurar y conquistar unas condiciones dignas, frente a las crecientes amenazas de la empresa.
Nuestra colaboración con la plantilla de limpieza de la UMA es histórica y se desprende de una necesidad general de unidad con el movimiento obrero. Ejemplo de esto fue la huelga convocada en 2020, cuando la colaboración con las limpiadoras llevó a la casi conquista de las reclamaciones del colectivo, si bien la pandemia echó por tierra lo construido hasta el momento. Es por eso que, una vez más, el FdE apoya los esfuerzos de las limpiadoras por reclamar sus derechos frente a OHLA, la empresa subcontrata encargada del servicio de limpieza. Esta está siendo una época de lucha: las limpiadoras llevan semanas intentando sentarse a negociar con la empresa para hacer valer sus propuestas, pero OHLA ha ido retrasando la fecha de la negociación, incluso llegando a amenazar con suspender la reunión si las limpiadoras se manifestaban. Estas, como no podía ser de otra manera, no se dejaron amedrentar por las amenazas y salieron a la calle el pasado martes 11 de mayo.
Eso nos lleva al momento presente. Las compañeras han conseguido que se acuerde una reunión con la empresa, en la que reclamarán las siguientes medidas:
- Que la empresa cumpla con las vacaciones de los fijos y establezca e informe a las limpiadoras de las fechas en las que podrán tomárselas. No es digno que las trabajadoras vivan en estado de completa incertidumbre.
- Que suplan la demanda de personal. La carga de trabajo sobre cada trabajador es abusiva, y la empresa se niega a contratar el personal necesario con el fin de ahorrar gastos en personal.
- Que la empresa cumpla con la paga de un día trabajado y del que las trabajadoras no han recibido todavía su parte en la nómina.
Como próximos pasos, las compañeras plantean una concentración tanto el mismo miércoles después de la reunión, como ese mismo viernes en el campus de Teatinos, a las que el FdE asistirá. Nosotros lo tenemos claro: sin los trabajadores y las trabajadoras no se mueve nada, tampoco en los centros de estudio. En palabras de María José, representante de las limpiadoras y cabeza de lucha: “Todavía aún nadie se ha dado cuenta de que mientras las limpiadoras no entren, nadie trabaja. En un hospital, si no se limpia no pueden operar; en un juzgado, si no se limpia no habría juicios; en las universidades, que es donde estamos, si no se limpia nadie da clase (…)”.
En última instancia es la Universidad de Málaga quien permite que se reproduzcan estas condiciones laborales. Desde el Frente de Estudiantes entendemos que la UMA es plenamente consciente de esta situación pues los trabajadores se han manifestado en reiteradas ocasiones, pero trata obviarlas en favor de la empresa. Exigimos un pronunciamiento público del gobierno de la universidad y que se asuman responsabilidades.
La comunidad educativa debe estar unida, organizada y trabajar hacia un futuro donde predominen los intereses de nuestra clase, puesto que de otra forma solo nos depara la incertidumbre y la precariedad.
¡Es momento de responder!