El Frente de Estudiantes ante la crisis del COVID-19
La Comisión Ejecutiva General del Frente de Estudiantes llama a reforzar la solidaridad del pueblo trabajador ante la amenaza a la salud pública que supone el CO-VID19. Llamamos al conjunto del estudiantado a tomar una actitud solidaria y responsable al respecto de las medidas de salud pública y consejos sanitarios, siempre bajo parámetros de coherencia y tranquilidad. Asimismo, ante el escenario de excepcionalidad que vive el país y las medidas tomadas por el Gobierno y las Comunidades Autónomas, que afectan de forma directa al normal desarrollo de la actividad académica a todos sus niveles, situamos lo siguiente:
- Exigimos que el estudiantado sea no solamente informado de manera actualizada y con todas las garantías, sino que sea tenido en cuenta a través de sus organizaciones representantes en la toma de decisiones al respecto de aquellas medidas que le afecten y a todos los niveles de interlocución (estatal, autonómico y de centro). La comunicación con el estudiantado deberá ser durante todo el periodo clara y eficaz, disponiendo los medios necesarios para atender a las dudas, problemas y reclamaciones. En ese sentido, desde el Frente de Estudiantes consideramos necesario tanto el aplazamiento de los exámenes ordinarios y extraordinarios como, en consecuencia, de la Selectividad. Denunciamos la irresponsabilidad y el carácter antipopular de las propuestas que vienen a perjudicar abiertamente a los hijos e hijas del pueblo trabajador en su desarrollo académico. La no realización de la EvAU no debe insertarse en la batería de medidas de excepcionalidad propuestas pues perjudica a una gran parte del estudiantado y especialmente al matriculado en la enseñanza pública. La necesaria eliminación de la Selectividad como criterio de acceso debe insertarse en el marco de la lucha estudiantil sostenida bajo la garantía de su sustitución por un sistema de orientación que no segregue y seleccione.
- Expresamos preocupación y rechazo al respecto de la gestión telemática de la vida académica. No solamente agudiza las desigualdades en el acceso a los contenidos respecto al modelo presencial -especialmente en los niveles de educación obligatorios- sino que supone la apertura de nuevas vías hacia la privatización educativa. Rechazamos que bajo el paraguas de la crisis presente se permita, bajo amparo del Ministerio, que sea la empresa privada la que supla las carencias presentes y manifiestas del sistema educativo, sentando las bases para la privatización y consecuente futura agudización de la referida brecha en el acceso a la educación (digital o no).
- A nivel universitario, las medidas adoptadas para la contención del COVID-19 han evidenciado las manifiestas carencias del modelo Bolonia, a pesar de que el refuerzo de internet y las TIC -en el marco de la evaluación continua del estudiante- fuera uno de los argumentos sobre los que se sostuvo la aprobación del Plan Bolonia. Se hace evidente que la formación teórica presencial (no necesariamente identificable con el formato clase magistral) es la que sostiene las enseñanzas universitarias, que ahora mismo se encuentran en situación de colapso. Exigimos que las evidentes carencias de Bolonia no sean pagadas por el estudiantado y se establezcan las vías para una evaluación académica consonante a la excepcionalidad que vivimos.
- La rápida expansión del virus requiere de medidas en materia de salud pública, que deberán ir en todo caso orientadas a la protección de la población más vulnerable, no solamente de los grupos de riesgo, sino de las capas sociales que con mayor avidez se exponen al contagio. Estos días estamos viendo ERTEs, EREs, despidos y vulneración de derechos en los centros de trabajo de familiares, amigos y vecinos. Especialmente se han visto afectados por estas medidas los trabajadores de las subcontratas (servicios externalizados) de nuestros centros públicos. Esta realidad no debe ser amparada bajo el pretexto del “deber de colaborar” sino que debe ser combatida desde las organizaciones del pueblo trabajador. Las empresas, amparadas por el Gobierno, están reaccionando ante la crisis existente socializando las pérdidas y haciendo pagar a los trabajadores sus consecuencias. No hay criterio de salud pública tras los ataques al conjunto del pueblo trabajador, sino la intención de la clase empresarial de cargar a nuestra clase con el peso de esta crisis.
- Desde el Frente de Estudiantes situamos la organización de clase como vía para defender nuestros derechos y expresar nuestros intereses y nos solidarizamos con el conjunto de trabajadores y trabajadoras que están soportando las duras consecuencias de esta crisis. Hacemos un llamado al conjunto de estudiantes que estos días se encuentran en casa para reforzar la solidaridad, los lazos y las sinergias entre los distintos sectores del pueblo trabajador: a ayudar a familiares y vecinos en el cuidado de niños y mayores, especialmente a aquellos que más dificultades encuentren en la conciliación; a difundir y compartir los abusos patronales y a explicar la necesaria articulación de una oposición manifiesta a la instrumentalización de la emergencia para justificar ataques a la clase obrera.
- Por último, expresamos nuestro más sincero respeto hacia el trabajo ejemplar del personal sanitario y no sanitario. Llamamos al conjunto de estudiantes a respaldar al conjunto de trabajadores de centros de salud y hospitales que están cubriendo con esfuerzo y voluntad personal las deficiencias de un sistema de salud devastado por los recortes de los ultimo años. Denunciamos la precariedad de sus condiciones así como la pésima situación y el colapso en el que durante esta crisis se encuentran los centros públicos, que hacen evidente la necesidad de la integración del global de la red de hospitales concertados y privados en el sistema público, poniendo la gestión de los mismos en manos y al servicio del conjunto del pueblo trabajador.
Situado todo lo anterior, reiteramos la necesidad de articular una respuesta responsable y seria en materia de salud pública. Recordamos la necesidad de mantener las precauciones y recomendaciones sanitarias. Apelamos al conjunto del estudiantado a organizarse con sus compañeros de clase y de centro para que la suspensión de las clases y el resto de medidas aplicadas en el ámbito educativo no resulte en un perjuicio, muy especialmente para quienes más esfuerzos realizan para poder estudiar. Insistimos en la necesidad de reforzar la socialización de experiencias, la comunicación e información y la solidaridad con los nuestros.